Para transformar los patrones insostenibles que caracterizan el uso de los recursos naturales y el territorio en Costa Rica, así como minimizar las externalidades negativas que esta situación genera en la salud pública y el medio ambiente, el país requiere, además de realizar esfuerzos importantes en política pública, y contar con recursos económicos para su implementación y seguimiento, crear incentivos o sanciones que modifiquen los hábitos y la cultura de la ciudadanía en este campo.